¡Feliz 1975!

En 1974 España estaba sumida en una crisis importante, la del petróleo del año anterior nos llegaba con retraso. Arias Navarro explicaba que si al consumidor el kilo de azúcar le costaba 34 pesetas era porque el Gobierno pagaba en puerto 73 pesetas para no endeudar más al español medio pero TVE no se amilanó y decidió que el espectador se merecía acabar el año con alegría así que encargó a Lazarov un especial de "Señoras y señores".
Allí estaban Victoria Vera, Ángela Carrasco y el ballet Zoom dando paso a una selección de los artistas más populares del año.
Cantantes y humoristas todos unidos cantando aquello de "la noche es joven, diviértete".
Y la gran Lola Flores levantando su copa para brindar por un año lleno de bien y prosperidad. Lo mismo deseo para todos, ¡feliz 2010!

Marisa Naranjo, ¡no eres culpable!

¡Ya está bien! ¡Es completamente injusto! Desde 1990 lleva aguantando esta mujer que le echen en cara un error del que no fue responsable, ¡hombre yaaaa! Vale, TVE le elige para que retransmita las campanadas, como una locutora de continuidad, sin salir en pantalla, lo habitual por aquellas fechas... y la pobre se equivoca, cierto es, no lo podemos negar pero ¿por qué sucedió aquello? Bien, analicemos el asunto, en primer lugar, recordemos cómo se vió en la tele:

   

 

Sí, confundió las campanadas con los cuartos pero es que nadie cuenta que a Marisa la metieron en un piso donde sólo escuchaba el jaleo de la calle y, además, a última hora falló el sonido de retorno de sus cascos con lo que era literalmente imposible que distinguiera el sonido del carrillón, el de los cuartos o el de las campanadas. ¡Y qué decir de la elegancia con la que omite el error y felicita el año instantes después de anunciar que ya llegan las campanadas! Marisa, yo te reivindico, voces como las tuyas no se han vuelto a escuchar en la tele, ¡ea!

Navidad en el "Un, dos, tres"

El programa estrella de TVE durante lustros solía realizar un especial navideño dedicado a los infantes. El decorado se vestía de blanco nieve y hasta los chistes eran menos picantones. Y eso desde la primera etapa, la presentada por Kiko Ledgard.
En las etapas de Mayra ya se hizo habitual que cada año los niños fueron los participantes en estas fechas y que las gradas estuvieran ocupadas por tiernos rapaces que en realidad babeaban con las mamá noeles que enseñaban pierna.
Aquí podéis distinguir, entre otras, a Lydia Bosch y Kim, la jefa de las secretarias, rodeando a la gran Mayrucha.
Y en la etapa presentada por Josep María Bachs (la penúltima del programa) el programa coincidió justo con la Navidad pero decidieron adelantar su horario y emitirlo antes de la Segunda Edición del Telediario de forma extraordinaria.
El programa navideño nos ha dado algunos momentos míticos, como la actuación de la repelente Nika Costa cantando rodeado de jóvenes patinadores o el anuncio de la separación de Enrique y Ana ¡horreur!



Y aquellos números musicales en ciudades nevadas... o no... hubo un año en el que las Navidades fueron... ¡rojas!

Christmas´ Specials

En EE.UU., la cuna de la televisión tal y como la conocemos hoy, las grandes cadenas ofrecían siempre especiales navideños familiares, musicales y melosos, muy melosos, buen ejemplo de ello es el programa "Sing along with Mitch", el primer karaoke de la historia dirigido por un jefazo de la Columbia que durante los 60 se hizo muy popular con este show en la NBC.
Perry Como, también desde la NBC, era el ejemplo perfecto del crooner para todos los públicos, "suave" como dirían los americanos (leído "sueif"). Y en Navidad lo era aún más, si cabe.
¡Y qué decir de los especiales de dibujos animados! "De cómo el Grinch robó la Navidad" o el anual de Snoopy... ¡qué grandes recuerdos!

Algunos videos, empecemos cantando con Mitch Miller, amiguitos:


Perry Como nos decía en 1958 que esto ya empieza a parecer Navidad:

Mención aparte merece el gran Andy Williams que durante casi una década realizó un especial de su programa para la NBC en estas fechas involucrando a su propia familia:

En definitiva ¡FELIZ NAVIDAD!

Grandes momentos de Telepasión

Parece que a pesar de las críticas que año tras año recibía Telepasión, buena parte de la audiencia lo echa de menos a tenor de los comentarios de ayer y de otros que he recibido en persona, pues bien, echemos la vista atrás y recordemos algunos momentos históricos, sólo una mínima selección que puede continuar más días y a la que se añadirán vuestros recuerdos. Vamos a ello.
Elisenda Roca de chica Almodóvar pero con su propia voz cantando aquello de "recordarás nuestros días felices" mientras el público de la sala le imita.
La simpar María Escario en su única intervención estelar remedando el clásico Ay, Tani con un look que la hace irreconocible. Ella reconoció años más tarde que tuvo que ingerir alcohol para atreverse a tamaña propelía.
Jordi Estadella entonando "Si yo fuera Chicho" con la música de "El violinista en el tejado", de extras María San Juan, Ramón Sánchez Ocaña y Guillermo Summers.
Marta García, Ana de Roque, José Antonio Maldonado y Paco Montesdeoca pillando un resfriado mientras destrozan "Cantando bajo la lluvia".

Y por supuesto, Julia Otero con un estupendo Blue Moon, atención a sus morritos.

Telepasión

En la Nochevieja de 1990 la gran Julia Otero inauguró un programa que se convertiría en un formato anual durante 3 lustros, Telepasión. Según ella misma lo definió era una función de fin de curso y convenció a los presentadores de la casa para cantar, actuar o simplemente hacer cameos. Aquel primer Telepasión es mítico y aún hoy, a pesar de tener casi 20 años de antigüedad sigue siendo un especial impecable, cosa que no se puede decir de todos los que le siguieron.
El año siguiente Constantino Romero, Elena Sánchez, Joaquín Prat y doña Adelaida tomaron el relevo con un especial dedicado a los musicales y se emitieron actuaciones inolvidables como la de Jordi Estadella cantando Si yo fuera Chicho (y no rico), Carlos Herrera y Mercè Conesa remedando a Astaire y Rogers o Constantino como Lee Marvin en La leyenda de la ciudad sin nombre.
Algunos como Ramón García o Ana Obregón eran inevitables, aparecían cada año haciendo el numerito y la verdad es que era mucho mejor ver a los hombres del tiempo de humoristas, para qué engañarnos.
Y por supuesto, al final, canción coral con todos los intervinientes con la emoción a flor de piel y entonando un himno a la esperanza, a la fé y a la caridad.
Vale, los últimos años, esos en los que eran una gala sin ningún tipo de ficción implícita, eran un pestiño de mucho cuidado pero hoy echo de menos un Telepasión.

¡Que no se acabe el mundo!

Ana Blanco y Francine Gálvez

En 1.990 TVE decidió sorprender a su audiencia con una pareja inusual para su Telediario del Fin de Semana, Ana Blanco y Francine Gálvez. En primer lugar, no era habitual que fueran dos mujeres las encargadas de dar la cara en un informativo, las parejas mixtas estaban a la orden del día. En realidad, la primera pareja la formaron Francine y Mari Pau Domínguez pero al poco tiempo Ana la sustituyó. Según los responsables de aquella idea pretendían que una fuera poli bueno y el otro poli malo, no seré yo quien se atreva a decir quien asumía cada rol, entre cosas porque no tengo tanta memoria y si bien recuerdo verlas allí juntitas, en la mesa del TD, era un crío que no percibía el matiz de la elección de noticias.

Ya contaba ayer que Francine fue la primera periodista negra que presentó un informativo en nuestro país. Ya tenía experiencia en cámara por aquella época porque había intervenido en el matinal "Buenos días". Su director, Luis Tomás Melgar, me contó hace tiempo que la había elegido por su naturalidad y eso no se lo puede negar nadie. Cierto es que fue muy criticada por sus continuas confusiones pero después demostró que sí podía hacerse cargo de otro tipo de espacios.

Aquí os dejo un video de la cabecera de ese informativo presentado al alimón por Ana y Francine, atentos a la velocidad de la grúa y lo americano de los titulares.

Y otro en el que Francine da paso a una noticia sobre la participación de Sergio Dalma en Eurovisión y tras la crónica de Antoni Esteve desde Cinecitá, despedida.

Y la primera fue...

Habitualmente se da por sentado que la primera presentadora negra de TVE fue Francine Gálvez pero en realidad no es así. Si bien fue la primera en convertirse en un personaje popular y hasta ahora la única que ha presentado un Telediario (no cuento a Desirée NDjambo que sí lo hizo en el 24 horas) hubo otra mujer que se le adelantó aunque en realidad el color de su piel no debería importar.
Sin embargo y por desgracia, sí importó a mediados de los 70 cuando Roxana Dupré apareció como locutora en el programa "625 líneas" dirigido por J. A. Plaza. Si todavía vivimos en una sociedad racista imagináos el revuelo que causó esta bella mujer en una España que todavía quería sacudirse la caspa del franquismo. Roxana apareció frecuentemente en ese programa-avance de la programación de las dos cadenas y como actriz intervino, al menos, en tres películas españolas: Los bingueros, La isla de las Vírgenes Ardientes y El carnaval de las bestias. No he encontrado más documentación sobre ella y fue Isabel Bauzá, presentadora de TVE también, quien me puso sobre su pista. Quede constancia pues de que ella fue la primera presentadora negra en nuestra tele.

Decorado cebolla

Cuando se inauguró TVE en 1.956 sólo había un estudio para todo, el del Paseo de la Habana, pronto se quedó pequeño a pesar de realizar pocas horas de emisión al día y para grandes programas trasladaban sus cámaras a teatros cercanos pero eso sólo era para cosas excepcionales así que todos se las tenían que apañar como podían en los bajos de aquel chalecito. ¿Cuál fue la solución al problema de usar el mismo espacio para distintos programas? Pues "el decorado cebolla", es decir, varias capas de paneles que se iban desechando según terminaba un programa y empezaba el otro, así primero se podía montar un foro taurino e inmediatamente después un bonito paisaje primaveral para presentar la actuación de unas gemelas cantantes.
Por cierto, obsérvese en esta foto inédita a Laurita Valenzuela despiporrada de la risa y saliendo del plano mientras Blanquita Álvarez mantiene la compostura y sigue con la presentación.

Telediario desde el Museo del Prado

El 30 de octubre de 2007 el Museo del Prado abría sus puertas (todas) tras la remodelación más importante en los últimos años y eso era noticia, por eso la primera edición del Telediario se trasladó a un escenario privilegiado. Ana Blanco saludaba a los espectadores con las Meninas de Velázquez como decorado.

La editora del informativo, Inmaculada Franco, intenta concentrarse entre las obras de arte que la rodean y los cámaras y sonidistas pisan con cuidado, nunca habían realizado un informativo en directo desde un lugar como el Prado, ciertos elementos técnicos parecen molestar en un entorno así.

Ana Blanco deja por un momento el auto-cue para entrevistar a uno de los responsables de la pinacoteca, la steadycam entra en acción, permite una realización mucho más ágil y dota de continuo movimiento a la conversación.

Éstas son algunas de las fotos que Javier Herráez (a quien dedicamos la entrada de ayer) sacó durante esa emisión, él asegura que fue un privilegio ser testigo de un programa así.

Homenaje a un fotógrafo

Las fotos que publico aquí provienen de distintas fuentes, archivo personal de presentadores, revistas antiguas, de mi propio trabajo, capturas de imagen de videos viejunos, del archivo de la revista LIFE y, fundamentalmente, del de RTVE. Y he aquí donde tengo que personalizar el agradecimiento a quien, desde hace unos 14 años, me provée de estos magníficos documentos. En esta primera foto aparece de espaldas ejerciendo su trabajo, fotografiando a Letizia Ortiz cuando iba a sustituir en verano al titular del TD.
Javier Herráez, en la foto aparece a la izquierda, lleva dos décadas trabajando en el antiguo Ente actual Corporación, ejerciendo de fotógrafo y aguantando a los periodistas que solicitamos su trabajo cada dos por tres. Buena parte de las fotos que vemos en las revistas promocionando series o programas son suyas o de sus compañeros del departamento, un equipo apenas reconocido y sin embargo fundamental porque, tened en cuenta, queridos bloggers, que si no fuera por el gran Bariego hoy no tendríamos ni idea de cómo se hacía televisión en los 50. Los foto-fija, esos que se pasan el día en los platós captando la esencia del programa en una instantánea, forman parte de la tele aunque nadie se acuerde de ellos. He dicho que se pasan el día en el plató pero no es exacto, aquí véis a Javier con un compañero en Candanchú a saber por qué retransmisión.
Ir a Riga para dejar constancia de nuestra participación en Eurovisión o a República Dominicana gracias a la serie Paraíso puede parecer un lujo pero en realidad el trabajo que realiza el fotógrafo es constante, no paran, de todo puede salir un buen encuadre.
Gracias pues a Javier y a sus compañeros no sólo por su trabajo como fotógrafos sino también como recuperadores de imágenes en color sepia, olvidadas por el tiempo y por la propia televisión. Si no fuera por ellos, no podríamos hablar de muchos espacios porque no existiría testimonio gráfico.
Y esta última foto la dejo como pista de lo que hablaré mañana, véis a Javier en el Museo del Prado, ¿qué estará fotografiando?

Milleluci

Marzo de 1974, comienza en la RAI un programa que une a las dos grandes estrellas femeninas de la época: Mina, cantante y diva, Raffaella Carrá, cantante y bailarina. Dos luminarias para un musical llamado precisamente "Milleluci".

Sólo 8 semanas para un espacio de gran presupuesto dedicado cada semana a un tema monográfico: la radio, la televisión, el musical, la opereta...

Y la mejor introducción que he visto nunca en televisión. Raffaella entra al teatro desde donde se transmite el espectáculo, suena Din Don Dan y los títulos de crédito... ¡¡¡bajan y suben desde la parrilla de focos!!! ¡son luces de neón para anunciar al director, al compositor, al decorador!

A pesar de que todos querían enfrentar a las dos presentadoras Raffaella siempre repite que fueron grandes amigas y que solían jugar a las cartas por las noches, lo cierto es que se ve una gran complicidad entre ellas y los números conjuntos son sensacionales.

Hora 11

Los 60 y los 70 fueron una edad de oro para los dramáticos en televisión, nada de colocar las cámaras en los palcos de un teatro para retransmitir una obra, ¡no! se desarrolló un lenguaje propio, el tele-teatro, una película de bajo presupuesto para adaptar en plató obras clásicas o modernas, textos clásicos o noveles, textos conocidos u originales... pero no todo era Estudio 1 también estaban otros contenedores como "Teatro Clásico", "Fila 0" o el que nos ocupa hoy, "Hora 11", que comenzó en 1.969. La foto superior pertenece a la obra "El velo negro"
Y ésta otra, que podría parecer una adaptación de "Ensayo sobre la ceguera" de Saramago, es de "Los ciegos". Son fotos que compré en un rastrillo y que por la parte trasera tienen impreso el sello de la dirección comercial de TVE y otro en el que se prohíbe la venta, el tiempo lo cura todo, hasta las prohibiciones.

Cuando el plató duerme

En mi etapa como fotógrafo para la sección de comunicación de una revista universitaria me encantaba meterme en los platós vacíos y sacar instantáneas como las que os presento hoy aquí. Es curioso comprobar que en estos lugares, habitualmente atestados de gente y con una actividad frenética, la calma parece más chicha que en otros sitios, quizás por eso se desatan tremendas tormentas en ellos.
Esta primera foto es del programa Nuestro Cine de Canal Plus, que se grababa en los Estudios Escosura, el mismo estudio donde se realizaba el Magacine que os mostré el otro día.
Esta otra es del mismo estudio y precisamente del Magacine pero ya con otro decorado al del post de hace unos días, si no recuerdo mal éste fue el último que se usó, el de su novena temporada.
En las fotos anteriores, el encargado de plató era amiguete mío así que me encendía los focos pero en los casos siguientes sólo estaban en funcionamiento las luces de seguridad. No hace falta que diga a qué pertenecen estas gradas...
El decorado de ¿Qué apostamos? estaba en los Estudios Buñuel aunque las primeras temporadas se emitieron desde la famosa Carpa de Prado del Rey.
Y en los mismos Buñuel se encontraba El debate de la 1, presentado por Luis Herrero. Un gran decorado para un programa que realmente no lo necesitaba.

Judy Garland Show

Judy Garland y la CBS, ¡ah, qué historia! La cosa empezó en 1.955 cuando la otrora estrella de Hollywood presentó la primera emisión en color de la cadena, un éxito de audiencia que animó a firmar un contrato para realizar más especiales. Finalmente sólo se emitió uno en 1.956. Al año siguiente Judy y la CBS se encontraban inmersos en un juicio por incumplimiento de contrato que se alargó hasta 1.961 cuando decidieron firmar un nuevo acuerdo. Fruto de esa firma Judy se reunió con sus amigos Frank Sinatra y Dean Martin para presentar un nuevo especial que a la sazón era una prueba para comprobar si un programa de variedades semanal comandado por la Garland funcionaría.
¡Y vaya si funcionó! La química entre los tres era extraordinaria y el espacio fue nominado a 4 premios Emmy.
Hubo un nuevo especial con Roubert Goulet y Phil Silvers como invitados que también recibió nominaciones a los galardones de la Academia de la Televisión así que todo estaba listo para iniciar la serie semanal... todo menos la propia cadena quizás. En las dos temporadas que estuvo en antena cambió varias veces de productor y eso implicaba un nuevo formato, si a eso añadimos que la competencia era la poderosa Bonanza... poco había que hacer.
Eso sí, revisen el programa especial con estos 3 grandes: JUDY-FRANK-DEAN. Oro puro.