Katharine Hepburn y George Cukor formaron una de las parejas más estables de Hollywood. No me refiero a una relación sentimental, ni mucho menos, sino a su connivencia artística. Juntos, como director y actriz, tuvieron grandes éxitos como "Mujercitas" o "Historias de Filadelfia" (también algunos fracasos que no merece la pena mencionarlos) así que cuando la CBS los reunió en 1979 para una tv-movie, fue noticia. El proyecto era interesante y ambicioso porque suponía rodar en Gales durante varios meses. Se trataba de la adaptación de "El trigo está verde" de Emlyn Williams que en 1945 ya había sido llevada al cine con Bette Davis como protagonista.
Hepburn, por entonces con 71 años y aquejada ya por la enfermedad de Párkinson (temblores evidentes, por ejemplo, en "Adivina quién viene a cenar esta noche" en 1967) aceptó la propuesta, en parte por la historia pero, sobre todo, por el hecho de volver a trabajar con su querido amigo George.
No era la primera vez que la poderosa actriz trabajaba en televisión, era un medio que siempre había rechazado hasta el punto de que sólo acudió como entrevistada al mítico programa de Dick Cavett y hasta "ordenó" con simpatía (pero con mucha firmeza) que cambiaran una mesa del decorado. Su debut se había producido en 1973 con "El Zoo de Cristal" de Tennessee Williams para la ABC, uno de los programas de mayor audiencia de aquel año con nominación al Emmy incluida. Dos años más tarde y en la misma cadena se emitió "El amor en ruinas" junto a Laurence Olivier y esta vez se llevó el preciado premio televisivo. Cuando el 29 de enero de 1979 se estrenó su película con Cukor ya no era una debutante en la pequeña pantalla pero seguía mostrando cierto resquemor y sólo aceptaba ofertas que le parecían excepcionales. En este caso encarnaba a una maestra de escuela de gran fortaleza que era destinada a un pequeño y empobrecido pueblo minero galés para dar clases de literatura. A pesar de la dificultad del entorno encuentra un alumno con un extraordinario potencial al que anima a presentarse a una beca para Oxford pero... hasta aquí puedo leer porque merece la pena revisar este film para televisión. La obra recibió dos nominaciones al Emmy, una de ellas para Kat, y no es de extrañar.