La semana pasada celebramos los 30 años de la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Barcelona 92, un auténtico reto televisivo como no había tenido antes la tele pública pero no debemos olvidar otros desafíos que llegaron de forma colateral a ese gran evento. El 26 de julio de aquel año, un día después de esa jornada histórica, TVE1 estrenaba su primer late night diario. "Juegos de sociedad" comenzaba a las 23.40 h y no tendría un horario fijo, dependía del programa, serie o película del prime time. Se trataba de un experimento dirigido por el añorado Joan Ramón Mainat y presentado por Inka Martí. ¿Y qué tenía de prueba ese programa? Nos remitimos a las palabras del director al diario "El País" el día del debut: "Intentaremos mostrar la intensa actividad que se vivirá en Barcelona durante los Juegos y para conseguirlo no nos hemos ceñido a un sólo género. El espacio tendrá contenidos informativos, humor, entrevistas y reportajes y con todo ello moldearemos día a día la idea del programa".
Inka Martí y Pilar Eyre en el elegante decorado de Paco Justel para "Juegos de sociedad" |
En definitiva, se trataba de mostrar el ambiente de la Ciudad Condal durante la cita olímpica pero no desde el punto de vista deportiva, sino del "social", de ahí su título. La periodista y escritora Pilar Eyre era colaboradora fija y sus crónicas llenas de ironía (y un punto de causticidad) se convirtieron en la sección favorita del espectador según le decía el propio Mainat. En conversación telefónica me contaba hace unos días que "Mainat era un genio, con una mirada sabía calibrar qué funcionaría y lo que no. Sobre la marcha alargaba espacios y los acortaba. A mí me decía que tenía que contar anécdotas porque era lo que funcionaba, incluso mejor que los grandes invitados." Joan Ramón fue uno de los directivos más creativos y valientes de TVE Cataluña así que no es de extrañar que se atreviera a lanzar un programa con un bajo presupuesto y con una ambición tan grande. En declaraciones a la periodista Silvia Díaz para la revista "Tele-Indiscreta" en esas semanas, Inka Martí reconocía: "Cuando Mainat me propuso presentar `Juegos de sociedad´ le dije que sí sin acabar de oír de qué iba el proyecto. Porque era él me lancé con los ojos vendados".
En esa misma entrevista la presentadora aseguraba: "Significa para mí un nuevo desafío y aunque me estoy acostumbrando a los retos, siempre tengo miedo ante algo nuevo. Eso debe ser cosa de catalanes. Siempre afronto lo nuevo con prudencia. Sin embargo, me estoy divirtiendo. Mi equipo es maravilloso, todos hablamos el mismo lenguaje y creo que se trasluce en pantalla. Además, nos reímos un montón, a pesar de irnos a dormir a las 5 de la madrugada para volver a empezar al día siguiente. Tal y como soy yo, trabajo todas las horas que hacen falta y eso significa mucha caña". Su compañera Pilar Eyre sólo tiene buenas palabras para la comunicadora: "Inka era fenomenal, guapísima, con unos recursos increíbles y, además, conocía a todo el mundo." Martí había presentado esa temporada "Peligrosamente juntas" con Marisol Galdón y desde su debut en el 86 en "Momentos", había mostrado su versatilidad en concursos como "Hablando claro" o "Aventura 92" (con De la Quadra Salcedo) o magazines como "Tal cual" y su edición veraniega. Tras este magazine nocturno presentaría un noticiario en La 2, "El informe del día". Abandonaría el mundo televisivo, según su misma confesión a "El Periódico", por un episodio de acoso. Desde entonces se dedica a la fotografía y la edición.
Julia Otero en animada conversación con dos grandes de la escena: Núria Espert e Irene Papas |
El programa competía con otro de similares intenciones pero formato más clásico, "Jocs de nit" con Julia Otero en TV3. La diferencia estribaba, sobre todo, en el presupuesto. Otero contaba con el apoyo total de la cadena y con un amplio equipo. En un amplio decorado que representaba simbólicamente un estadio, Julia recibía a invitados como Arnold Schwarzenegger o a Núria Espert charlando con Irene Papas codo con codo. En "Juegos de sociedad" tenían que improvisar diariamente para convencer a grandes personalidades a acudir al estadio, "siempre al filo de la navaja" me recordaba entre risas Pilar Eyre. La famosa periodista se hizo consciente enseguida de que "tenía dos posibilidades: ir a las cosas oficiales a las que nos invitaban o ir a los otros sitios. Me di cuenta de que el centro neurálgico era el Hotel Princesa Sofía y ahí me enteraba de todo. Me acuerdo de un día que me encontré allí con los Duques de Alba mientras yo comía y Jesús Aguirre ya no tenía casi relación con su familia ni con su mujer, estaba casi apartado. Le invité al programa porque era así como teníamos que captar a los invitados, todos los otros iban con Otero. Total, que vino y, mientras llegaba su intervención, estábamos en la sala de espera viendo en el monitor a Regina dos Santos y Paquito Clavel hablando de las bolas de una y de otro y haciendo juegos de palabras y Aguirre con cara de 'quiero irme de aquí' y yo diciéndole: '¿quieres una copa? ¿un bocadillo?'. Al final se quedó a la entrevista y me confesó que había pensado en irse pero había dado su palabra y tenía que cumplirla."
Pilar Eyre contándole alguna jugosa anécdota a Inka |
Eyre rememora aquella etapa con un sentimiento agridulce, su madre estaba en la recta final de un cáncer. Se había ido unos días a Francia cuando en una de sus llamadas diarias a su padre (recordemos que no existían los móviles aún) le informó de una llamada de TVE para colaborar en un programa diario sobre los JJOO y cómo estaban cambiando Barcelona. "A tu madre le haría ilusión", le dijo. Aceptó. "Vivía una bipolaridad absoluta. A las 2 de la madrugada, cuando terminaba el programa, me iba a cuidar a mi madre y velarla pero el resto del día tenía que estar muy animada, sonriendo ante las cámaras. Sé que los primeros días sí que lo veía, en una especie de duermevela continuo. Después ya no era tan consciente. Además, las monjas del hospital donde estaba debían de creer que yo era puta porque llegaba vestida como una puerta y vestida con faldas apretadas y satenes y cosas así. Supongo que pensarían que, después de todo, era buena porque me preocupaba mucho por mi madre. Murió el 2 de agosto y se produjo algo muy bonito, ya sabes que en los equipos de televisión se produce una unión muy fuerte aunque sea efímera y todos los miembros fueron al funeral. Fue muy emocionante".
Inka Martí entrevista a Catherine Fulop y Fernando Carrillo, protagonistas del exitoso culebrón "Abigail" en el primer programa de "Juegos de sociedad" |
¿El programa tuvo éxito? No hay datos de audiencia disponibles pero todo indica que sí. Al día siguiente, según recuerda la propia Eyre, los grandes magazines matinales de la radio reproducían fragmentos del programa. A pesar de la improvisación y del bajo presupuesto se cumplieron ampliamente las expectativas. Al hilo del poco dinero que se manejaba, la finalista del Premio Planeta en 2014 nos cuenta que como no había partida económica para su vestuario tuvo que pedirles prestados vestidos y trajes a su amiga la cantante y actriz Guillermina Motta. Quizás la modestia presupuestaria afiló el ingenio y se consiguió un tono canalla que contrastaba con el tono habitual de la cadena pública. Se generó un sentimiento de optimismo ante los buenos resultados y "la idea de todos era que siguiera durante la temporada normal" pero, a saber por qué, no fue así. No obstante, para Pilar fue el inicio de una nueva etapa porque "a los 15 días de terminar el programa, me llamó Luis del Olmo para colaborar en "Protagonistas" y supongo que era porque había trabajado en este programa. Me estoy dando cuenta ahora.
TVE no ha celebrado el trigésimo aniversario de "Juegos de sociedad" y, quizá, ni siquiera sea consciente de que este fue su primer late night diario. Eso sí, podemos encontrar en la web de Archivo RTVE su estreno.