En Prado del Rey, tres equipos comandados por Joaquín Arozamena, Luis Ignacio Seco y Joaquín Castro divididos en otros tantos turnos. Tres parejas de locutores pusieron cara y voz a la noticia. La primera estaba formada por la musa de la democracia televisiva Rosa María Mateo y José Miguel Flores.
La segunda por Emeterio Zurro, más conocido posteriormente como Tello, (en la foto) e Isabel Tenaille, la unión de la sobriedad del veterano locutor con una de las voces más bellas de la historia de nuestra tele y la frescura de una joven comunicadora que había triunfado con el magazine "Gente". Combinación que intentaría repetirse con la tercera pareja, Ángel de la Fuente y Adela Cantalapiedra (en la foto inferior). En este caso ese contraste no era tan fuerte porque Adela no destacaba por la naturalidad, era una eficaz locutora sin la impronta popular de la Mateo o la Tenaille. Nada menos que 25 equipos de filmación, todo un alarde para la época) se repartieron por Madrid para cubrir los 18 distritos electorales. En aquellos momentos, y hasta bien entrados los 80, las noticias se filmaban en formato cine y se enviaban las latas cada 20 minutos aproximadamente a varios puntos de enlace para que fueran recogidos por los mensajeros del Ente.
Curiosa fue la elección de esos lugares: Casa Ciriaco, el Bar Prieto y unos cuantos kioskos.
Dos unidades móviles y cuatro de cámaras autónomas sirvieron para mostrar en directo imágenes de las votaciones a las que se añadieron las proporcionadas por los centros territoriales a través de un programa regional simultáneo que se alargó desde las 16 hasta las 19.30 h.
He dejado para el final el centro real de la información aquella jornada, el Palacio de Congresos y Exposiciones donde se habían acreditado 4.000 periodistas de distintos países. Mauro Muñiz estuvo al frente de dos equipos de periodistas complementados por unos 120 técnicos, 13 cámaras de cine y 12 productores comandados por Juan Jesús Buhígas que, a la sazón, fue uno de los responsables generales de la retransmisión desde su cargo de director adjunto para la producción y gerencia de los Servicios Informativos. Desde allí los locutores Florencio Solchaga y Manuel Almendros iban dando paso a los comentaristas Alberto Delgado y Santiago López Castillo y a los entrevistadores Celso Vázquez, Heras Lobato y Pedro V. García. Además, TVE proporcionó enlaces unilaterales a los corresponsales de 14 televisiones europeas y americanas desde el Estudio 4 de Prado del Rey con Carmelo Barrera al frente de la realización.
La Casa quedó satisfecha con el trabajo y las críticas de la prensa al día siguiente también se enorgullecieron del pulso demostrado por una tele que era casi novata en estas lides. Las encuestas del panel de aceptación de la audiencia no incluían este programa especial así que los espectadores eligieron como sus favoritos aquella semana el capítulo 7 de la serie "Raíces" (incluida en el contenedor "Grandes Relatos", "El hombre y la tierra" ("El coto de Doñana"), "Mundo Submarino" ("Los tiburones durmientes del Yucatán"), "Estudio 1" ("Nosotros, ellas y el duende") y "Los Roper" ("Mi marido en casa de los vecinos").
La segunda por Emeterio Zurro, más conocido posteriormente como Tello, (en la foto) e Isabel Tenaille, la unión de la sobriedad del veterano locutor con una de las voces más bellas de la historia de nuestra tele y la frescura de una joven comunicadora que había triunfado con el magazine "Gente". Combinación que intentaría repetirse con la tercera pareja, Ángel de la Fuente y Adela Cantalapiedra (en la foto inferior). En este caso ese contraste no era tan fuerte porque Adela no destacaba por la naturalidad, era una eficaz locutora sin la impronta popular de la Mateo o la Tenaille. Nada menos que 25 equipos de filmación, todo un alarde para la época) se repartieron por Madrid para cubrir los 18 distritos electorales. En aquellos momentos, y hasta bien entrados los 80, las noticias se filmaban en formato cine y se enviaban las latas cada 20 minutos aproximadamente a varios puntos de enlace para que fueran recogidos por los mensajeros del Ente.
Curiosa fue la elección de esos lugares: Casa Ciriaco, el Bar Prieto y unos cuantos kioskos.
Dos unidades móviles y cuatro de cámaras autónomas sirvieron para mostrar en directo imágenes de las votaciones a las que se añadieron las proporcionadas por los centros territoriales a través de un programa regional simultáneo que se alargó desde las 16 hasta las 19.30 h.
He dejado para el final el centro real de la información aquella jornada, el Palacio de Congresos y Exposiciones donde se habían acreditado 4.000 periodistas de distintos países. Mauro Muñiz estuvo al frente de dos equipos de periodistas complementados por unos 120 técnicos, 13 cámaras de cine y 12 productores comandados por Juan Jesús Buhígas que, a la sazón, fue uno de los responsables generales de la retransmisión desde su cargo de director adjunto para la producción y gerencia de los Servicios Informativos. Desde allí los locutores Florencio Solchaga y Manuel Almendros iban dando paso a los comentaristas Alberto Delgado y Santiago López Castillo y a los entrevistadores Celso Vázquez, Heras Lobato y Pedro V. García. Además, TVE proporcionó enlaces unilaterales a los corresponsales de 14 televisiones europeas y americanas desde el Estudio 4 de Prado del Rey con Carmelo Barrera al frente de la realización.
La Casa quedó satisfecha con el trabajo y las críticas de la prensa al día siguiente también se enorgullecieron del pulso demostrado por una tele que era casi novata en estas lides. Las encuestas del panel de aceptación de la audiencia no incluían este programa especial así que los espectadores eligieron como sus favoritos aquella semana el capítulo 7 de la serie "Raíces" (incluida en el contenedor "Grandes Relatos", "El hombre y la tierra" ("El coto de Doñana"), "Mundo Submarino" ("Los tiburones durmientes del Yucatán"), "Estudio 1" ("Nosotros, ellas y el duende") y "Los Roper" ("Mi marido en casa de los vecinos").