El 16 de noviembre de 2014 fallecía con tan sólo 70 años Josep María Bachs, comunicador bien conocido en Cataluña y con un breve período de popularidad nacional gracias a (o por culpa de) la temporada 1993/94 del "Un, dos, tres". Su paso por el celebérrimo concurso fue agridulce tanto para él como para el propio director, Chicho Ibáñez Serrador, que a pesar de su reconocida mutua admiración y las ganas de ambos de trabajar juntos no se tradujo en una relación tan cómplice como se esperaba. Su etapa al frente del show fue de cambios y no todos funcionaron, además, llegó en pleno auge de las privadas y su audiencia fue bajando poco a poco (aunque hoy sus registros, por comparación, nos parecen altísimos).
En una retransmisión en directo para TVE Catalunya. Foto @arxiusendra |
En aquella época yo era un ingenuo adolescente que estudiaba en un instituto de Ponferrada y que formaba parte de la pequeña redacción de la revista del centro (que nunca llegó a editarse, por cierto). Propuse al director entrevistar a Bachs y no sé cómo lo convencí porque realmente no tenía nada que ver con los temas que, supuestamente, debíamos tratar en aquella imaginaria publicación. No recuerdo cómo conseguí su teléfono, posiblemente a través del teléfono de información de Telefónica que por aquel entonces era una mina, y tampoco tengo claro si en algún momento hablé con él o todo fue a través de su mujer Lola Cuadrado, también periodista. El caso es que aceptó, le envié las preguntas por correo postal (no había otra posibilidad) y me respondió al poco tiempo. Respuestas breves, concisas y, de vez en cuando, destilando esa ironía tan británica que fueron su sello. Hoy recupero esas palabras inéditas como homenaje a un profesional que no debemos olvidar.
Presentando el informativo catalán con Aurora Claramunt, ex azafata del "Un, dos, tres". Foto @arxiusendra |
En aquellos años noventa Internet era un concepto del que ni siquiera habíamos oído hablar y lo de ver cadenas autonómicas a través del satélite era impensable así que lo único que sabía de su carrera anterior era lo leído en alguna revista. Él mismo me aclaró que sus comienzos televisivos fueron "a través de TVE Cataluña, al principio de la década de los 70, mediante un programa llamado "Giravolt". Algo así como "Informe Semanal" pero en catalán y sobre temas de Cataluña y Baleares. Mi labor era la de presentador y guionista. Un trabajo puramente periodístico. Lo hice durante más de tres años." Sobre cómo había llegado allí fue tan humilde como sarcástico: "Simplemente me llamó el director del programa que es amigo mío, con lo cual se demuestra que es necesario tener buenos amigos. Pero me hizo trabajar duro, lo confieso."
En el circuito catalán de TVE hizo carrera en informativos, un ámbito muy alejado de aquel en el que triunfó en TV3 posteriormente. Fue reportero, presentador de los primeros noticiarios en catalán y de debates más o menos profundos. Su voz ya se había hecho popular en Barcelona gracias a sus locuras en Radio Juventud. Sus irreverentes programas en la emisora donde conoció a algunos de sus grandes amigos y compañeros, llegaron hasta donde la censura lo permitió. Si se le preguntaba en qué medio prefería trabajar respondía: "En la radio, sin duda, pero en televisión se cobra un mejor sueldo. Me siento un poco mercenario pero no me lo tengo en cuenta."
En el concurso "2/4 de Bachs" de TV3 |
Desde los 60 y hasta su ingreso en TVE a mediados de los setenta marcó tendencia en aquella radio taller pensada para crear cantera y que, en realidad, funcionaba como una emisora más y que era muy escuchada por las nuevas generaciones. Sus comienzos en la profesión fueron tan interesantes como opuestos: "En radio un programa llamado "Quisicosas", una especie de magazine con mucha coña, noticias, música y entrevistas. En televisión los reportajes que ya he mencionado. Eran la antítesis los unos de los otros, sin duda." La llegada de la tele autonómica a Cataluña cambió su carrera. De las noticias se pasó al entretenimiento. "Filiprim" fue el primer gran éxito de la cadena, un concurso con tantas secciones que al final era más un programa de humor que otra cosa. De ahí salió "La Parada", un spin off de lujo (más que nada por el título que enlazaba con su coletilla de despedida, "tanquem la paradeta") con entrevistas a grandes estrellas de Hollywood y colaboradores como Jaume Perich. Y más adelante, otros concursos con grandes toques de ironía como "2/4 de Bachs", "Dicciopinta" o "10 del 3".
Cuando Chicho anunció que la pareja Jordi Estadella-Miriam Díaz-Aroca sería sustituida por Josep María Bachs la prensa de fuera de Cataluña se apresuró a buscar información sobre este comunicador totalmente desconocido en el territorio nacional. La sorpresa fue grande a pesar de que su nombre ya había sonado en 1991 como sucesor de Mayra. ¿Cómo lo vivió él? "Con una enorme satisfacción, ya me lo habían ofrecido unos años antes pero no interesó. Ahora me arrepiento de no haberlo aceptado en su momento puesto que la última etapa del "Un, dos, tres" ha sido más floja." El nuevo presentador formaba parte de la estrategia de cambio que Ibáñez Serrador quería implantar en el show, quizás aquella metamorfosis fue demasiado radical o no llegó en el momento oportuno, el caso es que el resultado fue irregular y no satisfizo a casi nadie de los implicados. Josep María me describió su etapa con causticidad: "Cualquier experiencia nueva es positiva... aunque duela."
Foto @ProintelTV |
En cuanto a una posible vuelta, él lo tenía claro: "Volvería, lo que no es seguro es que deseen mi repetición. Hay que cambiar aunque sólo sean las caras." Pasarían diez años para que el "Un, dos, tres" regresara a la pantalla. Ni Bachs ni su amigo Estadella retornaron a su papel de anfitriones. Ambos, por cierto, eran amigos desde los tiempos de Radio Juventud y Jordi le había sustituido en "Filiprim", un espacio que seguía siendo un referente en la memoria de nuestro homenajeado: "En el programa en el que más he disfrutado ha sido "Filiprim" donde me divertí mucho y parece que la audiencia de Cataluña también. Lo importante es hacer algo en lo que uno disfrute y lo transmita a los demás." Me hubiera gustado ver juntos a los dos presentadores en el plató de Buñuel donde se grababa el espectáculo de la Ruperta en un especial aniversario del concurso. Ya ni siquiera existen aquellos estudios.
Silvia Abascal en su papel de la sobrina poseída en el "Un, dos, tres". Foto @ProintelTV |
El porqué del descenso de audiencia durante su etapa estaba claro para Bachs: "El público está cansado del humor grosero, basto e irrespetuoso pero no lo suficientemente maduro para aceptar un humor blanco e inteligente. Evidentemente no es mi hora. Estamos en un esperanzador intermedio. En Cataluña, afortunadamente, el público está más cerca de ese humor británico y sé que diciendo esto voy a molestar a alguien pero es la verdad, la audiencia en Cataluña ha sido superior a la del resto del Estado español."
Foto @ProintelTV |
En aquellos años noventa triunfaban "¿Quién sabe dónde?" en la Primera y "Cita con la vida" en Antena 3, entre otros "realities", un término que hoy tiene otras connotaciones televisivas. ¿Estaba dispuesto a presentar algo similar? "Un programa de sucesos sí, un programa de vergüenzas y confesiones de barrio no." ¿Cuál sería su formato ideal? "Si me dejaran hacer un programa a mi manera sería un Telediario en tono de humor. Sería un buen ejercicio desengrasante intelectual. Pero ya tengo tres cadenas asustadas con el proyecto de modo que..."
Con su querido amigo Lázaro Escarceller con el que ya había trabajado en "Filiprim". Foto @ProintelTV |
"La TV, evidentemente, está pasando un mal momento en España. Las televisiones públicas han perdido el norte y las privadas temen perder el norte de su cuenta de beneficios, de modo que en ambos casos el norte oscila a bandas entre la basura y la incorrección. Pero soy optimista y creo que algún día prime la calidad sobre la oportunidad. Lamentablemente yo ya no podré participar de esa serenidad. Soy un profesional del medio y me duele esta situación, odio la competitividad de la sociedad y de la televisión, no creo en esa jungla y odio a los domadores que se invisten como dioses del medio pero, de momento, no hay más remedio que doblegarse a sus latigazos de márketing. Pero se que algún dios vengativo, desde su Olimpo, nos lo pasará en bandeja antes de que finalice el siglo. Amén."
Con la actriz Luisa Martín (a la derecha) en la eliminatoria del "Un, dos, tres". Foto @ProintelTV |
Tras el "Un, dos, tres" no volvió a trabajar para toda España, TV3 le ofreció un nuevo contrato tras un par de años de castigo. "Si l'encerto, l'endevino", un concurso diario que tenía versiones en Canal 9, TVG y Telemadrid, fue otro éxito en su currículum al que le seguiría "A+a+". Después, la radio, su origen y su verdadero amor, primero en Catalunya Ràdio y luego en Ràdio 4 de RNE. Ya en la década de 2000 colaboró en RAC1 y aceptó la propuesta de su amigo Àngel Casas para presentar el matinal "Connexió Barcelona" en la televisión de la capital catalana BTV.
En aquella carta que le envié con la entrevista se incluía una pregunta más, ¿es tal como parece en la tele? Me respondió: "Soy irónico, mordaz, incisivo, amable, cortés pero nunca cínico. Sí, soy así." Palabra de Bachs.
Hola.
ResponderEliminarPor que Chicho sustituyó a Estadella por Bachs, si el concurso tenía buena audiencia en las temporadas 1991-92 y 1992-93)?
¿Que audiencia tuvo la temporada que presentó Bachs 1993-94)?
Gracias.
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EliminarMiriam Díaz-Aroca se iba del programa y Chicho consideró que era mejor un cambio total que no sólo incluía al presentador sino al estilo general del programa. Puedes consultar todas las audiencias en este enlace:
ResponderEliminarhttp://undostresweb.16mb.com/audiencias9.html
Saludos.