Es difícil superar éxitos iniciales en televisión, actores, directores y guionistas no han conseguido repetir esos programas o series que, de forma inesperada, consiguen triunfar entre el público y la crítica pero hoy estamos ante un ejemplo de que se puede hacer: "Night Gallery" emitido en la NBC entre 1970 y 1973.
Rod Serling era el factotum total de esta "Anthology series" como dicen en EEUU, es decir, una serie que no sigue un argumento periódico o que incluye varias historias autoconclusivas en cada capítulo, como era el caso. Un contenedor de relatos de misterios, suspense, ciencia ficción o terror presentados por el creador y guionista que seleccionaba las historias o las escribía él mismo. Serling ya era popular gracias a su mítica "The Twilight Zone". El nombre de "Night Gallery" hacía referencia a la galería de arte que sólo abría por la noche y que servía de escenario para las presentaciones, de hecho cada cuadro hacía referencia a esos relatos.
Aunque comenzó su emisión oficial en diciembre de 1970, el piloto vió la luz en agosto de 1969, ignoro por qué pasó tanto tiempo entre esa "prueba" y el primer capítulo pero merece la pena que nos detengamos brevemente en una de las historias del piloto: "Eyes" protagonizada por Joan Crawford y dirigida por... ¡Steven Spielberg!
El director de "E.T" debutó con este excepcional trabajo y, curiosamente, fue la última actuación de la otrora estrella hollywoodiense. Precisamente, la que fuera diva de los años 30 /40 tenía cierta desconfianza ante el novato y así se lo manifestó al propio Serling.
Pero el extraordinario producto visual que logró Spielberg soprendió tan gratamente a la estrella que le pidió disculpas públicamente y desde entonces le envió cartas cada vez que el director estrenaba una película.
La realización casi conceptual de este episodio sorprende hoy en día y entronca directamente con aquel mediometraje televisivo convertido en película más tarde, "El diablo sobre ruedas". Sin querer contar mucho del argumento para invitaros a que lo veáis, sólo diré que trata sobre una insoportable y millonaria mujer que acepta una operación para curarse de su ceguera con muchos riesgos.
Rod Serling consiguió un nuevo triunfo entre la crítica y un público fiel aunque no mayoritario, algo que ya había sucedido con su serie anterior. Eso no es óbice para que ambas permanezcan en el imaginario colectivo estadounidense y se conviritieran en objetos de culto.
Es difícil superar éxitos iniciales en televisión, actores, directores y guionistas no han conseguido repetir esos programas o series que, de forma inesperada, consiguen triunfar entre el público y la crítica pero hoy estamos ante un ejemplo de que se puede hacer: "Night Gallery" emitido en la NBC entre 1970 y 1973.
Rod Serling era el factotum total de esta "Anthology series" como dicen en EEUU, es decir, una serie que no sigue un argumento periódico o que incluye varias historias autoconclusivas en cada capítulo, como era el caso. Un contenedor de relatos de misterios, suspense, ciencia ficción o terror presentados por el creador y guionista que seleccionaba las historias o las escribía él mismo. Serling ya era popular gracias a su mítica "The Twilight Zone". El nombre de "Night Gallery" hacía referencia a la galería de arte que sólo abría por la noche y que servía de escenario para las presentaciones, de hecho cada cuadro hacía referencia a esos relatos.
Aunque comenzó su emisión oficial en diciembre de 1970, el piloto vió la luz en agosto de 1969, ignoro por qué pasó tanto tiempo entre esa "prueba" y el primer capítulo pero merece la pena que nos detengamos brevemente en una de las historias del piloto: "Eyes" protagonizada por Joan Crawford y dirigida por... ¡Steven Spielberg!
El director de "E.T" debutó con este excepcional trabajo y, curiosamente, fue la última actuación de la otrora estrella hollywoodiense. Precisamente, la que fuera diva de los años 30 /40 tenía cierta desconfianza ante el novato y así se lo manifestó al propio Serling.
Pero el extraordinario producto visual que logró Spielberg soprendió tan gratamente a la estrella que le pidió disculpas públicamente y desde entonces le envió cartas cada vez que el director estrenaba una película.
La realización casi conceptual de este episodio sorprende hoy en día y entronca directamente con aquel mediometraje televisivo convertido en película más tarde, "El diablo sobre ruedas". Sin querer contar mucho del argumento para invitaros a que lo veáis, sólo diré que trata sobre una insoportable y millonaria mujer que acepta una operación para curarse de su ceguera con muchos riesgos.
Rod Serling consiguió un nuevo triunfo entre la crítica y un público fiel aunque no mayoritario, algo que ya había sucedido con su serie anterior. Eso no es óbice para que ambas permanezcan en el imaginario colectivo estadounidense y se conviritieran en objetos de culto.
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