Adiós al Maestro Reverendo

Da igual que se llamara Ángel Muñoz-Alonso, que fuera uno de los pioneros del rock contestario y divertido en nuestro país, que ejerciera de arreglista para grandes como Miguel Ríos, que formara parte de multitud de bandas o que recorriera toda España demostrando su versatilidad musical e instrumental... o quizás no da igual pero lo cierto es que para el espectador medio este hombre canoso y, habitualmente, portador de gafas oscuras era el Maestro Reverendo, el eterno y fidelísimo compañero del Gran Wyoming en buena parte de sus aventuras. Hoy nos ha dejado con 57 años.

Desde sus primeras apariciones en televisión en reportajes rodados en cine para programas contraculturales de la 2, el Reverendo era la sombra del Wyoming. Ya en 1981, cuando a Monzón le ofrecen presentar un concurso cinematográfico bajo el nombre de "Silencio, se juega" se lleva a su músico de cabecera aunque, en realidad, su presencia era un poco extraña en este formato.

Después, "La noche se mueve" en Telemadrid, auténtico pionero del late-night en España (1992), "El peor programa de la semana" (1993) para la 2 y, por supuesto, "Caiga quien caiga" en Telecinco a partir del 96 y con más protagonismo para el Reverendo y sus riffs entre reportajes. Tuve la oportunidad de entrevistarlo justo tras la cancelación de ese programa, durante una de sus giras por España. No quería incidir mucho en el tema imaginando que todavía estaría escocido pero me sorprendió hablando con gran serenidad, para él lo mejor de aquello había sido tener trabajo fijo cada semana durante varios años (declaración no exenta de sorna, claro). Con "La azotea" no triunfaron y en "El intermedio" no hay orquesta así que aunque seguían haciendo bolos y colaboraciones de manera puntual, para el televidente el Reverendo andaba desaparecido, cosa que no creo que a él le molestara mucho.