lunes, 26 de octubre de 2009

Julia Child

A principios de los años 60 los norteamericanos empezaron a sentir cierta admiración indisimulada hacia todo lo que sonara a francés, la publicidad, el cine, la música y ciertas lecturas les hacían pensar que París era el destino ideal para ir con su pareja y que los franceses sabían disfrutar de la vida. EE.UU. estaba viviendo un período económico de bonanza y las parejas de clase media y media-alta soñaban con poder viajar al país en el que todo era placer... Y en ese momento llegó Julia Child con un libro enciclopédico escrito con otras dos autoras sobre la cocina francesa. A pesar de la reticencia inicial del editor por algo tan específico, el tocho de más de 700 páginas fue un exitazo y en 1.963 Julia debutó en la WGBH con su propio programa televisivo.
Graduada en Artes, con experiencia en el campo de la Publicidad y con 1.88 m de altura, Child se convirtió en una auténtica estrella televisiva. Sus vivencias en Francia acompañando a su marido, diplomático, fueron una revelación. La primera vez que comió en Rouen decidió que tenía que aprender el arte culinario y consiguió ser aceptada en la exclusiva escuela Le Cordon Bleue. Su primera serie televisiva duró 10 años y consiguió el primer Emmy a un espacio divulgativo.

En realidad Julia estuvo realizando programas televisivos hasta 2.000. cuatro años antes de su fallecimiento. Fue portada de la revista Time, protagonista de parodias en programas como Saturday Night Live, un musical se basó en su vida y ahora Meryl Streep está promocionando una película en la que interpreta a Child en una historia paralela con una admiradora de sus libros y programas.


Aunque no fue la primera cocinera televisiva sí que podemos decir que fue (y es) la más popular y querida de todas ellas. Su agradable voz, entusiasmo, simpatía y capacidad para improvisar fueron las claves de su éxito, aparte, evidentemente, de sus extraordinarios conocimientos de aquello que divulgaba.


Cada vez que veo a un/a locutor/a hablando sobre un tema sin tener ni puñetera idea, siguiendo un guión que posiblemente no entienda y explicando conceptos con total desafección me doy cuenta de que hemos profesionalizado demasiado esto de la tele y que necesitamos más "intrusos" con mucha idea y con dotes de comunicación, nada más y nada menos.



2 comentarios:

  1. digamos un ... Karlos Arguiñano?
    Interesantisimo (y muy ameno, cosas que son muy dificiles de conseguir juntas) blog, llevo aquí ya un rato largo.
    Saludos

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